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peregrinos y el final del Persiles ... más el episodio de la Trifalda con las dueñas barbadas y el vuelo mágico ... (I. vv. 401-22). el bálsamo de Fie...

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Alicia Villar Lecumberri (Ed.) A L C

CERVANTES EN ITALIA DÉCIMO COLOQUIO INTERNACIONAL DE LA ASOCIACIÓN DE CERVANTISTAS

X-CIAC Academia

In memoríam

de España en Roma, 27-29

Ted R1LEY, Manuel

FERRER-CHIVITE

septiembre

atque Stefano

2001

ARATA

CERVANTES EN ITALIA ACTAS DEL X COLOQUIO INTERNACIONAL DE LA ASOCIACIÓN DE CERVANTISTAS Academia de España, Roma 27-29 septiembre 2001 Alicia Villar Lecumberri (Ed.)

Asociación de Cervantistas Palma de Mallorca, 2001

Esta obra ha sido integramente subvencionada por la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. MINISTERIO DIRECCIÓN GENERAL DE EDUCACIÓN, ' DEL LIBRO. ARCHIVOS CULTURA Y DEPORTE Y BIBLIOTECAS

© de los textos: los autores, 2001 © de la edición: Asociación de Cervantistas

Impresión: Esment. centro especial de trabajo de AMADIP

Dep. Legal: PM-176-2002 ISBN: 84-607-3996-1

ÍNDICE

Aldo Ruffinatto: Cervantes en Italia, Italia en Cervantes

3

Jordi Aladro: La novela cervantina contra los vinos italianos

21

Mercedes Alcalá Galán: Vida y escritura a vuelapluma: la llegada a Roma de los peregrinos y el final del Persiles» José Manuel Bailón Blancas: Pasos perdidos de Cenantes

25 en Italia (¡568-1570

Catalina Buezo: Cervantes y el mito del villano en su rincón: folclore,

35

realidad

histórica y tradición literaria en Los alcaldes de Daganzo Jean Canavaggio: Cervantes y Roma

43 53

William H. Clamurro: Las dos doncellas de Cervantes: identidad, honor y anacronismo Anthony Cióse: El narrador humorístico de Don Quijote

65 73

Daniel Eisenberg: Los autores italianos en la biblioteca de Cervantes 87 Laura Fernández García: La Primera parte del Quijote como fuente de cancioneros: nuevos datos sobre el éxito y la recepción del texto" 93 Ruth Fine: Nuevas reflexiones sobre la presencia del Antiguo Testamento en el Quijote: el caso de la Biblia de Ferrara 109 Antonio Gargano: Contra la «concepción progresiva de la historia»: barbarie y civilización en los primeros capítulos del Persiles

121

Luis Gómez Canseco: Cervantes contra la hinchazón literaria (y frente a Avellaneda 1613-1615) Luis Gómez Gallego: Don Chisciotte en el cine italiano Aurelio González: Espectacularidud en dos comedias cervantinas con espacios italianos: El laberinto de amor y La casa de los celos Jesús G. Maestro: Referencias teatrales cervantinas en las tragedias de Vitlorio Alfieri

129 149 155 165

Giuseppe Grilli: Estudiantes ocultos y estudiantes al descubierto en las Novelas ejemplares

187

Steven Hutchinson: "Los primeros movimientos no son en mano del hombre: Retórica de ¡a emoción en Don Quijote

199

Kcnji Inamoto: ¿Cervantes escribió un soneto laudatorio para La Dragontca de Lope de Vega?

207

Víctor Ivanovici: Preciosa y su prenda tan preciada (una lectura de Lagitanilla

213

Santiago López Navia: De nuevo sobre el tratamiento de Cervantes en la novela biográfica: la etapa italiana según Bruno Frank y Stephen Marlowe

229

Isabel Lozano-Renieblas: El Cervantes reazionario de Cesare de Lollis

245

Beatriz Mariscal: "Una jornada antes de Roma". Observaciones sobre el Persiles

251

José Manuel Martín Moran: Paratextos en contexto. Las dedicatorias cervantinas y la nueva mentalidad autorial

257

Emilio Martínez Mata: Don Quijote en el bando de la ilustración

273

Diego Martínez Torrón: La polémica cervantina de Díaz Benjumea

279

Carlos Mata Induráin: Una parodia dramática del Quijote: El hidalgo de la Mancha, de Matos Fragoso, Diamante y Juan Véle:, de Guevara

289

Heinrich Merkl: Método experimental y fe en la Primera parte del Quijote

295

José María Mico: Cervantes y el Ariosto Menor

301

Ertugrul Onalp: El significado de corsario y pirata en la obra de Cervantes

309

Chili Park: España e Italia en las Novelas ejemplares

315

Michelina Patania: Don Chisciotti e Sanciu Panza de Giovanni Meli

323

Idoya Puig: Imagen y significación de la ciudad de Roma en las Novelas ejemplares Marie-Blanche Requejo Carrió: Un legado de los Novellieri: La burla y los caminos del ingenio en Rinconete y Cortadillo Joseph V. Ricapito: Don Quijote y el Cortigiano de Castiglione:un ejercicio en la imitación, el rechazamiento y la parodia Carlos Romero Muñoz: Novelas ejemplares. Cuestiones ecdóticas (iii)

329 337 349 363

Enrique Rui!: Cervantes, Tirso y otras fuentes en No hay cosa como callar de Calderón

381

Maria Caterina Ruta: Cervantes y el "granero de Italia "

387

M. Victoria Sáez Pascual: La Segunda parte de El Quijote: ¿Estaremos leyendo una novela inexistente Mariarosa Scaramuzza Vidoni: Ajenos ile sí mismos.

397

La escisión del yo en personajes cervantinos Ana Suárez Miramón: El primer homenaje de Calderón a Cervantes

403 423

Bénédicte Torres: Sentidos corporales y "aprehensiones " del mundo por Sancho Panza 431 Eduardo Urbina. Richard Furuta. Rajiv Kochumman y Eréndira Melgado: La edición electrónica variorum del Quijote: Avances y estado actual 439 Juan Manuel Villanueva: El rufián dichoso ¿Es una típica comedia de santos'/ . 449 Anthony N. Zahareas: La función de la picaresca en Cervantes

459

UNA PARODIA DRAMÁTICA DEL QUIJOTE: EL HIDALGO DE LA MANCHA, DE MATOS FRAGOSO, DIAMANTE Y JUAN VÉLEZ DE GUEVARA Carlos Mata Induráin Universidad de Navarra C o m o es s a b i d o , d o n Quijote de la M a n c h a es personaje que en n u m e r o s a s o c a s i o n e s ha sido llevado a las tablas, desde fechas muy c e r c a n a s a la publicación de la novela cervantina hasta nuestros días, casi siempre como figura, esto es, c o m o personaje ridículo.' U n a de esas versiones escénicas (también paródica, burlesca) es la c o m e d i a El hidalgo de la Mancha, escrita por tres i n g e n i o s : J u a n de M a t o s F r a g o s o , Juan Bautista D i a m a n t e y Juan Vélez de G u e v a r a . El texto m a n u s c r i t o de la fiesta c o m p l e t a (baile, c o m e d i a , e n t r e m é s y fin de fiesta) se c o n s e r v a en la O e s t e r r e i c h s c h e N a t i o n a l b i b l i o t h e k (Biblioteca Nacional de Austria, en Viena, Cod. V i n d o b 13.187, fols. 12-87v), y existe una e d i c i ó n m o d e r n a a c a r g o de M a n u e l G a r c í a Martín ( S a l a m a n c a , E d i c i o n e s Universidad de S a l a m a n c a , 1982, por la que citaré). Esta obra g u a r d a relación con el g é n e r o de la c o m e d i a burlesca del Siglo de O r o , f o r m a d o por p i e z a s de d i s p a r a t e s q u e se solían r e p r e s e n t a r en el P a l a c i o real por C a r n e s t o l e n d a s , f o r m a n d o p a r t e de las fiestas c o r t e s a n a s d e C a r n a v a l . En El hidalgo de la Mancha los personajes recuerdan c o n s t a n t e m e n t e que son C a r n e s t o lendas, y este dato hace p r e s u p o n e r que la c o m e d i a habría sido representada en esas fechas del a ñ o (en c o n c r e t o , el m a r t e s de C a r n e s t o l e n d a s de 1673, en el teatro del A l c á z a r de M a d r i d , p o r la c o m p a ñ í a de A n t o n i o de E s c a m i l l a ) . Dice Inés: «Y yo tendré con e n t r a m b a s / alegres C a r n e s t o l e n d a s » (vv. 2 5 8 - 5 9 ) . a lo que responde don Pedro: 2

Don Pedro

Y han de ser regocijadas, porque ha llegado al Toboso un hidalgo de la Mancha a quien llaman don Quijote. que la plebe alborotada tiene con sus aventuras y da en decir que es su dama Dulcinea del Toboso, una princesa encantada; y te aseguro. Beatriz, que es rara la extravagancia de su locura en el modo de lenguaje, adorno y cara (I. vv. 260-72).

S a n s ó n C a r r a s c o c o m e n t a a Inés, refiriéndose a don Quijote: « N o es de p e r d e r esta fiesta; / y o p i e n s o hacerle mil burlas / ya que son C a r n e s t o l e n d a s » (vv. 1. vv. 7 3 6 - 3 8 ) y don Juan recuerda que «don Pedro / dio en tener conversación / y admitir n o b l e s sujetos / a q u e s t a s C a r n e s t o l e n d a s / para diversión del t i e m p o » (I, vv. 9 5 4 -

290

Carlos Mata

Induritili

5 8 ) . A ñ á d a s e la m e n c i ó n de « p e r r o con vejiga» (I. v. 553) y el h e c h o de q u e Sansón Carrasco y otros tres criados vestidos de matachines, tras mantear a S a n c h o , lo golpeen con unas vejigas g r a n d e s (II. acotación tras el v. 4 3 0 : S a n c h o recordará las vejigas en II. v. 7911. A continuación analizaré dos c u e s t i o n e s : por un lado, la caracterización de don Quijote c o m o un loco risible objeto de burlas c a r n a v a l e s c a s por parte de los d e m á s p e r s o n a j e s : por otro, q u i é n e s son los a g e n t e s de esas burlas. U n o de los rasgos e s e n c i a l e s en la c a r a c t e r i z a c i ó n de don Quijote es su d e s e o de salir en b u s c a de a v e n t u r a s , c u y a ejecución está r e s e r v a d a para su b r a z o («a un l a d o . / q u e a mi v a l e r o s a diestra / g u a r d a el cielo esta a v e n t u r a » . I. vv. 6 0 7 - 6 0 9 ) . C u a n d o su fantasía caballeresca c h o q u e con la dura realidad, se excusará con la persecución de magos y e n c a n t a d o r e s , que quieren e m p a ñ a r el brillo de sus hazañas ( « M a l a m b r u n o , mi e n e m i g o / el e n c a n t a d o r , intenta / b o r r a r por este c a m i n o / mis n u n c a vistas proezas». I. vv. 3 3 3 - 3 6 ) . O t r o rasgo d e s t a c a d o es la fidelidad a su d a m a , Dulcinea, a c u y a fe nunca va a faltar (véase, por e j e m p l o . I. vv. 3 5 8 - 6 6 y 6 9 1 - 9 5 ) . Desde el punto de vista lingüístico, don Quijote se caracteriza por el e m p l e o de a r c a í s m o s (fablar. feniio.sura, feridci, desfacer entuertos). 3

4

5

6

Los episodios de la novela cervantina que en esta pieza teatral a l c a n z a n m a y o r desarrollo d r a m á t i c o son: en la Jornada I. el episodio de la carta e n v i a d a a Dulcinea, que S a n c h o dice haber visto c o m o simple labradora (vv. 4 3 4 - 8 6 ) , la c o n q u i s t a del y e l m o de M a m b r i n o . en realidad bacía de b a r b e r o (vv. 5 0 0 - 7 6 ) y. sobre t o d o , la liberación de los g a l e o t e s (vv. 9 9 5 - 1 2 0 6 ) ; en la J o r n a d a II. el eje c e n t r a l lo constituye el d e s e n c a n t a m i e n t o de Dulcinea por medio de los 3.300 azotes que se ha de d a r S a n c h o (vv. 2 5 7 - 3 2 6 ) . la burla a don Quijote, que q u e d a c o l g a d o de la v e n t a n a (vv. 3 5 5 - 4 0 2 . no c u l m i n a d a h a s t a el v. 4 7 4 . c u a n d o lo baja S a n s ó n C a r r a s c o ) : más el episodio de la Trifalda con las d u e ñ a s barbadas y el vuelo m á g i c o de C l a v i l e ñ o (vv. 8 5 5 - 9 9 2 ) : en la J o r n a d a III e n c o n t r a m o s todo lo relativo a M a e s e P e d r o y el retablo de M e l i s e n d r a (vv. 139-298) y la a v e n t u r a de los m o l i n o s de viento (vv. 6 3 2 - 8 3 ) . Aventuras o motivos m e r a m e n t e aludidos son: las p u ñ a d a s que dieron a don Q u i j o t e y S a n c h o en la v e n t a (I. vv. 3 9 5 - 9 6 ) . los palos de los y a n g ü e s e s (I. v. 3 9 7 ) . los r e b a ñ o s de c a r n e r o s y o v e j a s q u e d o n Q u i j o t e cree ejércitos (I. vv. 4 0 1 - 2 2 ) . el b á l s a m o de F i e r a b r á s (I. vv. 4 2 3 - 2 5 y 1 1 4 5 - 4 6 ) . la penitencia en la cueva de M o n t e s i n o s (III. vv. 42-43) o la aventura del vizcaíno (III, vv. 4 5 2 - 5 7 ) . Aparte de los pasajes entresacados del Quijote hay otros dos originales: el de los c a b a l l o s d e s b o c a d o s y el del gallo e n c a n t a d o , en las J o r n a d a s I y III. respectivamente. Don Quijote e s . en esta obra, un loco' del que los d e m á s personajes se pueden burlar para d i v e r t i r s e : se dice q u e servirá de d i v e r s i ó n de las tristezas de d o ñ a Beatriz (I. vv. 2 6 0 y ss.) y se habla de su «ridicula g r a c i a » (I. v. 2 9 0 ) . Inés lo califica de «don Quijote de la legua» (I. v. 7 4 0 ) . El c o m i s a r i o que c o n d u c e a los galeotes se dirige a él con estas palabras: « H o m b r e o fantasma o quien eres» (I, v. 1069). T o d o s le dan por necio (II. v. 4 9 4 ) , Inés lo llama pelmazo (III. v. 5 1 9 ) y vinagre (III, v. 5 4 1 ) . T e n e m o s de don Quijote una d o b l e p r e s e n t a c i ó n : en p r i m e r lugar, a n t e s de v e r l o en e s c e n a , otros p e r s o n a j e s h a b l a n de él. Las p r i m e r a s pinceladas se nos ofrecen en el diálogo de Inés, don Pedro y d o ñ a Beatriz, q u i e n e s c h a r l a n a c e r c a de sus a v e n t u r a s , q u e traen a l b o r o t a d o a t o d o el p u e b l o , de su

Una parodia

dramática

del

Quijote.

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e n a m o r a m i e n t o de D u l c i n e a del T o b o s o , de Su locura y de la fama q u e corre por toda C a s t i l l a de «sus raras c o s a s » (I, v. 2 7 5 ) , q u e son de t o d o s m u y c e l e b r a d a s ; c o m e n t a n q u e gastó su h a c i e n d a en libros de caballerías; don Pedro dice que su hija se holgará al verlo « p o r q u e es una viva e s t a m p a / de los F e b o s y A m a d i s e s / m a s con ridicula gracia» (I, vv. 2 8 8 - 9 0 ) . Acto seguido se presenta don Quijote en e s c e n a (la acotación tras I, v. 308 dice: «Sale don Quijote armado con peto y morrión, y un lanzan en la mano») y a partir de entonces ya lo v e m o s sobre el e s c e n a r i o , de forma que él m i s m o se caracteriza con su hablar y su actuar. En c u a n t o a los agentes de la burla, el primero en avisar del carácter b u r l e s c o del hidalgo m a n c h e g o es d o n P e d r o , quien pronostica que las fiestas de C a r n e s t o l e n d a s serán muy regocijadas p o r q u e ha llegado don Quijote; recuerda a l g u n o s datos de su e x t r a ñ a c a r a c t e r i z a c i ó n y su l o c u r a , y su hija B e a t r i z c o m e n t a q u e v e r l o será « e x t r e m a d a / diversión de mis tristezas» (I, vv. 2 9 2 - 9 3 ) . Por su parte, en la p r i m e r a a p a r i c i ó n sobre las tablas de a m o y c r i a d o , en el m o m e n t o en q u e d o n Q u i j o t e p r e g u n t a a su e s c u d e r o si llevó la carta a D u l c i n e a , S a n c h o d e c i d e s e g u i r l e el h u m o r : «pero a q u í llevarle es fuerza / el h u m o r con un e n g a ñ o » (I, vv. 4 4 0 - 4 1 ) , y e x p l i c a q u e la e n c o n t r ó a h e c h a n d o el trigo y s u d a d a , etc. Y la m i s m a e x p r e s i ó n e m p l e a r á m á s adelante don P e d r o : c u a n d o don Quijote entre en su c a s a c r e y e n d o estar en un castillo e n c a n t a d o , el padre de d o ñ a Beatriz señalará en un aparte: « D o n Quijote es éste, a q u í / llevarle el h u m o r es fuerza» (I, vv. 5 9 7 - 9 8 ) . P o c o d e s p u é s , don P e d r o e x h o r t a a d o ñ a Beatriz para q u e , r e m e d a n d o el estilo de los libros de caballerías, se divierta con tan curioso invitado: Don Pedro

Beatriz bella, aqueste es aquel hidalgo de quien tantas cosas cuentan. que, pensando que tú estás en mi casa con violencia, viene a vengarte, y pues eres, hija mía. tan discreta. y de historias de estos libros sabes el estilo, llega y habíale, que de esta suerte podrá ser que le diviertas (I, vv. 616-26).

Sansón C a r r a s c o y doña Beatriz van a calificar a don Quijote r e s p e c t i v a m e n t e de figura y visión: « ¿ H a y figura m á s e x t r a ñ a ? / ¿ H a y visión m á s e s t u p e n d a ? » (I, vv. 6 3 7 - 3 8 ) ; «¡Sujero raro!, a ñ a d e d o ñ a Beatriz (I, v. 639). La d a m a se p r e s e n t a r á ante don Quijote a f i r m a n d o q u e su padre es el e m p e r a d o r de A r m e n i a , y ella «la sin par C l o d o m i r a , / infanta de la N o r u e g a » (I, vv. 6 6 7 - 6 8 ) , n u e v a fantasía caballeresca que t r a s t o c a r á el s e n t i d o del h i d a l g o . C u a n d o o y e n en la c a s a q u e u n o s b r u t o s d e s b o c a d o s p o n e n en p e l i g r o un c o c h e , salen a a y u d a r don Quijote y don P e d r o , y S a n s ó n C a r r a s c o apostilla: « N o es de p e r d e r esta fiesta; / y o p i e n s o h a c e r l e mil burlas / ya q u e son C a r n e s t o l e n d a s » (I. vv. 7 3 6 - 3 8 ) . Y al final de la J o r n a d a I es S a n c h o quien n u e v a m e n t e e n g a ñ a a don Quijote: R o c i n a n t e no se m u e v e p o r q u e el socarrón escudero lo ha trabado por las patas.

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Carlos Mala

¡nduráin

Ya en la J o r n a d a II. d o ñ a Beatriz quiere divertir a su a m i g a d o ñ a M a r g a r i t a con la locura de don Quijote, y ella explica que ha d a d o las o p o r t u n a s d i s p o s i c i o n e s a los criados: Doña Beatriz

El ruido de las anuas dice que es él, y deseo divertirme tanto que a costa de algún sereno aquí te traigo a que veas las locuras de este necio, tal vez discreto y tal vez loco y siempre majadero: a cuyo fin los criados de casa dispuestos dejo, y este instrumento te traigo para que principio demos como al gusto de escucharte a la intención del suceso. Canta algo, por tu vida, que toque en sus devaneos (II. vv. 211-26).

C u a n d o a m b a s d a m a s tengan q u e retirarse de la reja d o n d e se hallaban con la esperanza de ver a sus a m a d o s , se lamentarán de que vayan a p e r d e r s e el final de la burla. Dice d o ñ a Margarita: « N o p o c o , / bella Beatriz, siento / de ver el fin de esta burla» (II. vv. 3 4 5 - 4 7 ) . M á s tarde será la traviesa criada Inés la que finja ser una d a m a e n c a n t a d a que le habla desde lo alto de una ventana, aventura que a c a b a con don Quijote colgado de la muñeca. Burla a S a n c h o , y no a don Quijote, es la que traman y llevan a efecto Sansón C a r r a s c o y otros tres h o m b r e s vestidos de m a t a c h i n e s : lo m a n t e a n y le g o l p e a n con unas vejigas g r a n d e s . Y p o c o d e s p u é s el m i s m o S a n s ó n C a r r a s c o , d i s f r a z a d o de g i g a n t e con b a r b a , se p r e s e n t a c o m o un s a b i o a m i g o q u e v i e n e d i s p u e s t o a ayudarles. En este pasaje se repite c o m o estribillo: «Oh majaderos, / el a m o loco y tonto el e s c u d e r o » (II. vv. 2 8 1 - 8 2 y 4 9 9 - 5 0 0 ) . S i g u e a v a n z a n d o la a c c i ó n , y de nuevo es don Pedro quien, para distraer a don Juan y don Enrique, los invita a ir con su familia y pasarlo en g r a n d e a p r o v e c h a n d o la locura de don Quijote (II. vv. 6 3 4 53). Los criados Carrillo y A l v a r a d o dicen que se mezclarán con todos «para a y u d a r a reír» (II, v. 748). Y. en efecto, d e s p u é s «Sale Carrillo en forma de enano con una barba muy grande» (II, acotación tras el v. 854) a n u n c i a n d o la llegada de la señora T r i f a l d a . q u e es la c r i a d a L u i s a v e s t i d a de d u e ñ a b a r b a d a , la cual se p r e s e n t a a c o m p a ñ a d a de otras dos mujeres de igual guisa. El e p i s o d i o p a r o d i a d o se r e m a t a con la burla de C l a v i l e ñ o . sobre c u y o s lomos creerán i n g e n u a m e n t e estar v o l a n d o a m o y e s c u d e r o . D o n P e d r o c o m e n t a r á al ver lo f á c i l m e n t e q u e p u e d e n ser e n g a ñ a d o s e n t r a m b o s : « M á s lástima hace que risa / de estos simples la ignorancia» (II. vv. 9 6 7 - 6 8 ) . Carrillo a ñ a d e el a n u n c i o de n u e v a s b r o m a s para el día siguiente: «Pues v a m o s para que a nadie / hallen aquí, y a c a b a d a / crean la aventura ha d a d o / fin, d e j a n d o aquí esta lanza. / a prevenir otras burlas / con que os diviertan m a ñ a n a » (II, vv. 9 6 9 - 7 4 ) .

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Quijote.

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Y así s u c e d e , en efecto. Ya en !a Jornada III la criada Inés p r o p o n e , refiriéndose a don Quijote, s e g u i r « b u r l a n d o su loco t e m a » (III, v. 5 3 2 ) ; «El d i a b l o / es esta Inesilla», p o n d e r a L u i s a (III, vv. 5 3 7 - 3 8 ) . Inés se p r e s e n t a ante el loco m a n c h e g o c o m o despavorida, fingiendo que ha visto un gallo e n c a n t a d o , y su travesura suscita un n u e v o c o m e n t a r i o de L u i s a : « L a Inesilla es lindo trasto» (III, v. 5 9 9 ) . M á s adelante la propia Inés valora los efectos de su e n g a ñ o , al afirmar que «Bien la burla se logró» (III, v. 6 8 4 ) . N o s a c e r c a m o s ya al final de la c o m e d i a , que — c o m o sucede h a b i t u a l m e n t e — «en b o d a s ha de parar». C u a n d o sale don Quijote p r e g u n t a n d o por el invasor del alcázar, don Pedro — s e r i a m e n t e p r e o c u p a d o por el h o n o r familiar tras h a b e r d e s c u b i e r t o a un h o m b r e en su c a s a — r e s p o n d e q u e ya n o es t i e m p o de b r o m a s : « S e ñ o r d o n Quijote, a h o r a / no e s t a m o s para esas c h a n z a s » (III, vv. 7 9 0 91). Sus palabras ponen fin a las burlas para pasar a las veras del desenlace: el doble m a t r i m o n i o de don Juan con d o ñ a Beatriz y de don Enrique con d o ñ a Margarita. Sin e m b a r g o , a lo largo de t o d a la c o m e d i a sí había h a b i d o t i e m p o y ocasión para las c h a n z a s — a l e n t a d a s por el propio don P e d r o — , para esas b r o m a s con las que todos los personajes se habían b u r l a d o de don Quijote repetidamente. En c o n c l u s i ó n : en esta c o m e d i a escrita en c o l a b o r a c i ó n por tres i n g e n i o s don Quijote se nos presenta c o m o un hidalgo loco del que todos los d e m á s personajes se p u e d e n burlar p a r a p a s a r el t i e m p o y divertirse. Y para divertirse, c o n c r e t a m e n t e , d u r a n t e las fiestas de las C a r n e s t o l e n d a s , fechas en que tiene lugar la acción de la c o m e d i a (y fechas en las q u e solían r e p r e s e n t a r s e las c o m e d i a s b u r l e s c a s ) . D e h e c h o , a l g u n a s de las b r o m a s que sufren don Quijote y S a n c h o en El hidalgo de la Mancha son b r o m a s c a r n a v a l e s c a s . L a e s t r u c t u r a c o m p o s i t i v a de la c o m e d i a r e c u e r d a la de la s e g u n d a parte del Quijote, en c o n c r e t o los episodios q u e suceden en el P a l a c i o de los D u q u e s : aquí, c o m o en la inmortal n o v e l a c e r v a n t i n a , u n o s p e r s o n a j e s se valen de la s i m p l e z a , i g n o r a n c i a y locura de otros para reírse a su costa, para p a s a r un buen rato d i v e r t i d o s , i n v e n t a n d o burlas de m a y o r o m e n o r crueldad. La i m a g e n q u e se nos ofrece de don Quijote es la habitual en los bailes y m a s c a r a d a s de la é p o c a : se trata de una mera figura ridicula, un loco « p r o v o c a n t e a risa», sin que se apunten en su retrato rasgos que lo doten de m a y o r trascendencia o profundidad. NOTAS Véase Francisco Rico, «Las dos interpretaciones del Quijote», en Breve biblioteca de autores españoles. 3. ed.. Barcelona. Seix Barral. 1991. pp. 139-61. Sobre la función de las formas carnavalescas en la comedia burlesca, véase E. R. González. «Carnival on the Stage: Cejilla y Pocris. comedia burlesca». Bulletin of the Comediantes. 30. 1978. pp. 3-12; y Dolores Holgueras. «La comedia burlesca: estado actual de la investigación». Diálogos Hispánicos de Amsterdam, 8/11, 1989. pp. 467-80 y «La comedia burlesca y el Carnaval», en Javier Huerta Calvo (dir.). Teatro y Carnaval, Madrid, Compañía Nacional de Teatro Clásico, 1999 (Cuadernos de Teatro Clásico, 12). pp. 131 -44. 1

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Las Carnestolendas se mencionan también en III, vv. 305-309, en boca del mismo don Juan: «Ya sabéis que han de venir / a tomar por diversión / de aquestas Carnestolendas / este sitio Margarita / y Beatriz» (véanse más referencias en I. vv. 914-22, en III, vv. 533-37 y 72226). 1

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Carlos Mata

Induráin

Para una reinterpretación del Quijote a la luz de la tradición carnavalesca y la parodia véase Augustin Redondo, Otra manera de leer el «Quijote»: historia, tradiciones culturales y literatura. Madrid. Castalia, 1997. • Véase también 1. vv. 729-32. 987-88, II, vv. 62-66. 255-56, 913-16. 932-33, III, v. 566. etc. " Véase también 1. vv. 385-86 y 561-64; II. vv. 180-91; III, vv. 230-32. 602-04 y 632-36. 4

Los pasajes en los que se alude a su locura son los siguientes; I. vv. 2 6 9 - 7 2 . 7 5 1 - 5 2 («Tan loco es este criado / c o m o el a m o » , dice d o ñ a Beatriz). 7 9 3 - 7 9 4 («El más raro loco / que crió n a t u r a l e z a » , en boca de d o ñ a Beatriz), 9 7 5 - 7 6 ( « V a m o s , que éste es don Quijote. / con su tema le d e j e m o s » , dice d o n J u a n ) , 1107 («Este h o m b r e sin d u d a es loco», señala el G a l e o t e 1.°): en II. vv. 211 y ss., 2 8 1 - 8 2 , 327 ( « N o t a b l e locura», indica doña Margarita; « E x t r a ñ a » , a ñ a d e Beatriz). 4 2 3 ( « ¿ P u e s mal h a b l a d o es el loco'.'», p r e g u n t a Sansón C a r r a s c o ) , 4 9 9 - 5 0 0 , 6 4 7 - 4 8 ; en III, vv. 2 9 5 - 9 6 ( « Q u i e n se mete con un loco / este g a l a r d ó n e s p e r a » , a p a r t e de M a e s e Pedro), 4 8 7 («¡Que este loco haya e s t o r b a d o . . . » , dice doña Beatriz), 5 0 3 - 5 0 9 ( « ¿ N o es mejor atropellailo / para que m á s sus locuras / no nos sirvan de e m b a r a z o ? » , pregunta don Enrique, a lo que contesta don Juan: « Q u e d e m o s la muerte a un loco / será del valor agravio. / y mirad cuál q u e d a r e m o s / si s u c e d e lo c o n t r a r i o » ) . 5 3 0 - 3 2 ( « Y o quiero / de esa confusión sacaros / burlando su loco t e m a » , dice Inés), 590-91 ( « ¿ H a y tan e x t r a ñ o sujeto?, p r e g u n t a d o ñ a Beatriz y r e s p o n d e d o ñ a M a r g a r i t a : « ¡ Q u é locura de h o m b r e ! » ) , 6 6 9 - 7 0 («El que le hace el d a ñ o / a su m e r c e d , es su t e m a » , indica S a n c h o ) , 6 8 3 ( « C u a n d o usted de a q u í esté s a n o » , dice S a n c h o ; hay que imaginar que el actor haría un gesto señalándose la cabeza) y 760. 7