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Escuela Regional Cuyo de Cine y Video Cátedra de Producción I toman en cuenta, en términos generales, una importante cantidad de factores - impacto y ...

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Escuela Regional Cuyo de Cine y Video Cátedra de Producción I

KAMÍN, Bebe (1999) Introducción a la producción cinematográfica. Presupuesto – Plan financiero: Bs.As., Centro de Investigación Cinematográfica, Cap. 4, pp. 30 – 43.

4. ETAPAS DE PRODUCCIÓN Producción y comercialización Convencionalmente se refiere como proceso de producción al tiempo y los acontecimientos que van desde la determinación, por parte del productor, de llevar a cabo el proyecto hasta la obtención de las primeras copias de la película. El proceso de producción se divide en las siguientes etapas: desarrollo, preproducción, rodaje y postproducción. Todo lo referente a la explotación comercial y pública, tiraje de copias, publicidad, distribución, estreno y exhibición de la misma se conoce como comercialización.

Desarrollo Se entiende como desarrollo del proyecto la etapa previa a la producción propiamente dicha que se caracteriza por el estudio, evaluación y definición del proyecto a llevar a cabo. El comienzo de una producción no puede fijarse con precisión. Existen muchos proyectos que se inician con impulso pero que debido a diferentes motivos - particularmente frecuentes los de orden económico - no avanzan más allá de las intenciones. Como se dijo, la génesis de una película puede gestarse desde distintos intereses, ya sea un guión que ha causado una excelente impresión1, la vigencia de un actor de moda, la continuidad de trabajo de un director de prestigio, etc. En rigor, podría afirmarse que el verdadero comienzo de una producción es cuando se materializa la primera obligación cierta o, a dicho de otro modo, se firma el primer contrato. Aunque esto no significa que el proyecto llegará hasta el final - hay casos de películas filmadas y nunca terminadas - el hecho de haber asumido un compromiso concreto por parte del productor materializa su intención de producir la película2. Teóricamente el primer contrato debe ser aquél que vincule al productor con el productor ejecutivo ya que este profesional deberá, antes que nada, realizar el estudio de factibilidad del proyecto. Analizará el guión y dará a conocer su opinión sobre el tema. El próximo paso a tomar será contratar al guionista y/o director que se hará cargo de la tarea siguiente. Basado en su conocimiento del medio y su experiencia profesional podrá evaluar el proyecto tanto en términos de su factibilidad económica-financiera como en su eventual proyección en el mercado. Dicha evaluación parte de la base de respetar el genuino interés del inversor de recuperar y hacer rentable el capital en juego pero, también, de la característica del proyecto en sí mismo. Es habitual que los productores ejecutivos desaconsejen la realización de historias de muy buen contenido pero de difícil respuesta de público así como que estimulen la realización de aquéllas que, aunque no demasiado elaboradas en sus conflictos, tienen, se supone, una buena respuesta en el mercado. En términos ideales, esto lo afirma la mayoría de los profesionales del área, se trata de recomendar una película de intensos contenidos y una gran comercialidad potencial. Aunque no abundan, estos proyectos son los que tienen mayor posibilidad de ser concretados. Para evaluarlo se 1

En ciertas productoras, donde llega una importante cantidad de guiones con la intención de ser producidos, existe el rol del reader, o lector. Pueden ser una o más personas que tienen a su cargo la lectura de los guiones y la confección de informes donde se sintetiza el argumento, género, potencial interés del mercado, orden prespuestario, etc. Estos reportes serán dirigidos a los responsables de la productora que, en función de su propia evaluación, pedirán, o no, mayor información sobre el proyecto. 2

En países donde existe una relación fuerte entre la industria y las franquicias que otorga el Estado para la producción de películas el comienzo real de la producción de una película se produce cuando el proyecto es beneficiado oficialmente por dichas facilidades. Esto le da un carácter “legal” que permite la obtención de otros recursos para la producción. En rigor, tampoco este caso asegura llegar a buen término al final del proceso. Página 1

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toman en cuenta, en términos generales, una importante cantidad de factores - impacto y calidad de la historia a ser contada, sector del mercado al cual está dirigida, antecedentes del posible director, un casting potencial, costo estimado, etc. - que van dibujando al producto. Una vez definidos estos elementos y tomada la determinación de llevar adelante el proceso se inicia la primera etapa de producción.

Preproducción Se trata de una etapa de fundamental importancia ya que de una buena gestión durante su transcurso resultará una eficaz realización de las siguientes. En otros términos, durante la preproducción deben desarrollarse todas las tareas que garanticen un normal funcionamiento de la etapa siguiente, el rodaje, y del resto del proceso. Se trata de un momento agitado, activo, con simultaneidad de acciones y decisiones que definirán los aspectos más sobresalientes del trabajo.

Director Como se afirmó, una vez determinado el proyecto a ser realizado se contacta al director que será el responsable de llevar a cabo la película. Sin duda que los antecedentes del mismo, tanto de carácter profesional como de su ”sintonía” con el mercado, son de importancia fundamental. Hay directores que son más aptos según el género que se trate o el tipo de producción que se propone. Lo cierto es que se trata de un rol determinante de muchos de los resultados de la película y cuyo aporte real es difícil de cuantificar. Deberá cumplir con los planes pero también aportar su singularidad creativa para completar una tarea difícil. Tendrá capacidad de decisión pero deberá ajustarse a ciertas normas propuestas desde la producción, etc. Se trata de uno de los factores ”sobre la línea” cuya definición requiere de un especial equilibrio y que, normalmente, queda ligado al destino final de la película.3 Una vez convocado el director se inicia la lectura y discusión del guión. Se analizan sus exigencias, en el orden artístico y en el material necesario, para acordar un concepto general sobre el mismo. También se comienza a listar una posible nómina de colaboradores que deberán incluirse al trabajo. Se trata de técnicos calificados, ”cabezas de equipo”, que serán los principales responsables en las diferentes áreas técnicas necesarias para la producción de la película.

Personal Técnico Uno de los aspectos más complejos y delicados que debe enfrentar la producción de una película tiene que ver con la incorporación de personal, tanto técnico, artístico o de otro carácter, necesario para llevar a cabo las tareas. En general, en el cine existe un código implícito entre quienes participan en su realización, más allá de los lugares que ocupen dentro de la producción. Pertenecer al equipo de una película significa compartir un objetivo y hasta un ideario ya que quien trabaja en la profesión cinematográfica tiene, generalmente, una adhesión personal, afectiva, con su tarea. Esto no significa que no se presenten conflictos. Cada integrante lleva consigo, además de su capacidad profesional, un cúmulo de temas personales que, en algún momento, pueden revelarse. Si bien la conducción del grupo es tarea del director - de su personalidad dependerá, en gran medida, el desarrollo armónico de los vínculos interhumanos - es misión de la producción estar atento a las necesidades, técnicas y personales, de los integrantes de quienes componen el grupo que trabaja en la película y mantener una relación equilibrada y estable con la gente. Normalmente los temas de conflicto deberán ser enfrentados por la producción para cumplir con sus objetivos principales: asegurar el buen desarrollo del proceso de producción y arribar, satisfactoriamente, al final del mismo. El personal técnico a ser contratado es uno de los primeros temas a resolver, 4 3

En muchas oportunidades es el propio director quien ha generado el proyecto - escribió, solo o en colaboración, el guión a ser filmado - y hasta puede ser él mismo el productor. En ese caso deberá ser él quien convoque al productor ejecutivo para que lo acompañe ya que asumir todos esos roles simultáneamente no augura un buen desarrollo de los hechos. 4 Se tomará como “modelo” de equipo técnico al que normalmente trabaja en las producciones profesionales de un orden mediano de producción, según lo establecen las prácticas y reglamentaciones en la República Argentina. Esto no significa que no pueda existir otro tipo de organizaciones o se puedan constituir equipos técnicos de características diferentes a las aquí descritas. Página 2

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Son dos los roles que se incorporan desde el comienzo de la preproducción: el Asistente de Dirección y el Jefe de Producción. Son los colaboradores inmediatos del director y del productor ejecutivo, respectivamente. Ambos, que tendrán una tarea destacada y conductora durante todo el proceso, harán el desglose del guión y, luego, cada uno se dedicará a un aspecto específico: el asistente al diseño de un plan de rodaje, o plan de filmación, o de varias alternativas del mismo. El jefe de producción a la confección de un presupuesto ”bajo la línea”, Estas tareas se realizan en permanente consulta con el director y el productor ejecutivo. Sus resultados son un elemento clave para la evaluación que el productor ejecutivo hace de sus primeros cálculos. Con lo elaborado por el jefe de producción completa los datos del presupuesto y, junto al plan de rodaje propuesto por el asistente, determina los tiempos de producción. La combinación del presupuesto con el plan de rodaje conduce al plan financiero, o sea la distribución de los costos a lo largo del tiempo. De éste, a su vez, se deriva el plan económico o calendario de inversiones. A medida que la preproducción se desarrolla se van incorporando nuevos técnicos. Son los responsables de los aspectos más importantes: director de fotografía, director de arte, escenógrafo, etc. Los seleccionados son elegidos de común acuerdo entre el director, que propone la presencia de sus favoritos en las áreas artísticas, y el productor ejecutivo que debe negociar las condiciones de contratación de cada uno. El resultado es una transacción entre los deseos del director y la realidad económica del proyecto. Una vez incorporados las principales ”cabezas de equipo” se contacta con el resto del personal. Normalmente los técnicos responsables de cada rama proponen los nombres de los otros técnicos que lo acompañarán en la tarea5. En otros términos, una vez determinada la nómina de los principales responsables, el resto de personal surge casi inmediatamente aunque, en todos los casos, debe coincidir la demanda económica de los técnicos con los límites en los salarios establecidos por la producción. En la mayoría de los casos quien lleva adelante las negociaciones es el jefe de producción que, ante cualquier situación que no esté a su alcance resolver, recurrirá al productor ejecutivo. En términos generales se puede referir a una organización del equipo técnico dividido en ”ramas” a través del siguiente esquema: Dirección

Producción

Imagen

Arte

Montaje y Sonido

Asistente

Jefe de Producción

Director de Arte

Montajista

Primer Ayudante

Primer Ayudante

Director de Fotografía

Escenógrafo

Ayudante de Montaje

Ayudante de Escenografía

Cortadora de negativos

Utilero

Director de Sonido

Carpintero

Ayudante de Sonido

Segundo Ayudante

Segundo Ayudante

Camarógrafo Primer Ayudante de Cámara Segundo Ayudante de Cámara Jefe de eléctricos (Gaffer)

Vestuarista

Capataz

Ayudante de vestuario

Reflectoristas

Modista

Maquinistas

Maquillador

Foto fija

Peinador

El productor ejecutivo se reserva la designación de su propio equipo: el jefe y los ayudantes de producción. Serán ellos los encargados de llevar a la práctica sus planes así como de controlar la marcha de los mismos. Sin embargo hay ciertos roles que tienen una mayor influencia en la marcha general de la producción y que el propio productor ejecutivo trata de controlar. El primer ayudante de cámara, por ejemplo, responsable del foco óptico en la cámara, es un elemento en el que hay que depositar una extrema confianza. En su eficacia y profesionalismo reside la posibilidad de evitar

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Por ejemplo, el director de fotografía, el más calificado de los técnicos, tiene un equipo humano que normalmente trabajan con él en la cámara - camarógrafo, ayudantes de cámara - y en la iluminación - gaffer, reflectoristas, etc. Página 3

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repeticiones de tomas que complican, económica y funcionalmente, la producción. También el director de fotografía, un estrecho colaborador del director, es uno de los principales factores en el cumplimiento de los planes ya que su mayor o menor demora en la puesta de luces serán fundamentales para cumplir con los plazos previstos. En general el productor ejecutivo concurre al sindicato de técnicos para presentar el proyecto y conversar sobre las condiciones en las que se va a desarrollar la producción. Los acuerdos a los que se arriban forman parte de las cláusulas del contrato que se firma, normalmente, en la sede del sindicato unos días antes del inicio del rodaje. En esa reunión, a la que concurren todos los técnicos de la película, se acuerdan ciertos valores - la comida, viáticos, etc. - que regirán a lo largo del rodaje. Los contratos con los técnicos se rigen por una serie de aspectos que están determinados por normas legales y de usos y costumbres de la actividad cinematográfica. Se trata de contratos por tiempo determinado que estipulan obligaciones y definiciones por ambas partes - monto del salario, tiempo de duración, prestación profesional, etc. - que están regidos por convenios y/o acuerdos entre las organizaciones gremiales y profesionales que representan a los trabajadores y los productores. En los contratos se incluyen las obligaciones de la productora para la retención de los aportes jubilatorios, de obra social, el sueldo anual complementario (aguinaldo), el porcentual correspondiente a vacaciones y otras obligaciones vigentes que luego deberá depositar en las diferentes cajas. Estos costos, que representan un importante porcentaje del monto del salario del técnico, constituyen un rubro significativo dentro del presupuesto de la película. A su vez el productor deberá retener los porcentajes que el técnico debe aportar a diferentes obligaciones. La etapa de preproducción es un momento de pruebas y cada área técnica comienza a desarrollar sus actividades. El asistente y los ayudantes de dirección preparan y realizan las primeras etapas de la selección de actores, casting, y coordina su tarea con el resto del equipo. Dirección de arte, el escenógrafo y su asistente, se dedica a la búsqueda de locaciones y materiales de utilería que resultan de su propio desglose del guión, así como la presentación de los bocetos decorados. Se diseñan las propuestas de vestuario, maquillaje y peinado para los diferentes personajes, etc. Todas estas acciones requieren de un permanente apoyo, y control, por parte del equipo de producción. Para ello cuenta con una ”caja chica” que suministra el dinero necesario para los gastos: scouting, comidas, transporte, gastos varios, etc. Al mismo tiempo realiza las gestiones para obtener los permisos de filmación en las entidades correspondientes, organiza y acompaña las visitas a las posibles locaciones recogiendo los datos necesarios para una eventual contratación de los mismos así como los contactos para resolver los temas de transporte, comida, elementos de rodaje y de funcionamiento general. También acompaña al equipo de fotografía y cámara en las pruebas de materiales, equipos y lentes que se realizan antes del comienzo del rodaje. El equipo de producción es responsable del transporte de material virgen y de la organización y archivo de la documentación de las entradas y salidas de materiales. El productor ejecutivo ya habrá convenido, en base a las indicaciones del director de fotografía, la cantidad y característica del material óptico necesario para el rodaje con alguna de las empresas proveedoras de material que existen en el mercado así como los acuerdos con los laboratorios que deberán procesar el material.6 Debido al cúmulo de tareas es recomendable “descentralizar” la tarea de producción y confiar en diferentes ramas, especialmente las relacionadas con la dirección de arte, la producción de sus necesidades. Sin duda un vestuarista conoce con mayor detalle la posibilidad de obtener precios favorables, o aun gestionar acuerdos de ”canje”7 con diversas empresas de venta o alquiler de ropa, con las cuales mantiene una relación más estrecha que el propio equipo de producción. Ya sea porque el jefe de producción estableció un límite a los gastos o por el hecho que sea consultado por los mismos, los responsables de rama deben acordar con producción los posibles compromisos económicos que resultan de sus gestiones. En última instancia será el propio jefe de producción quien autorice dichos gastos.

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El material virgen es uno de los insumos importados que se consume en una producción de cine. En algunos casos ciertos servicios son realizados en el exterior, como la mezcla final de sonido, la trascripción a negativo, ciertos efectos especiales, etc 7 Existen casos de ”canje”.que son acordados por el productor ejecutivo. Son aquellos donde productos o marcas aparecen destacadas en la imagen de la película y por lo cual se paga a la producción. Se trata de una “publicidad encubierta” que permite colectar fondos para la película o evitar gastos. Página 4

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Mientras estas tareas se desarrollan en la producción “de campo”, en su mayoría a cargo del jefe de producción, el productor ejecutivo realiza las gestiones que exigen definiciones de importancia. Tendrá a su cargo concretar y administrar los recursos económicos necesarios para desarrollar las tareas - en instituciones oficiales o privadas, bancos, inversores -, el logro de acuerdos comerciales con las empresas de materiales y servicios - laboratorios, alquiler de equipos, representantes de actores, salas de sonido, música, seguros de equipos y personal - y gestiones institucionales como asociaciones profesionales, gremios, sindicatos, etc. Al mismo tiempo ajustará los detalles de su plan financiero y del calendario de inversión que controlará a medida que pasen los días. Para el productor ejecutivo esta etapa significa construir los pilares donde se asentarán las futuras acciones: cuanto más firmes más seguro estará frente a los problemas que se le presenten. En definitiva la preproducción es un período de intensas gestiones que tiene como objetivo reducir al mínimo los imponderables que se van a presentar en la siguiente etapa. Una buena preproducción, es decir, una buena tarea de prevención en todos y cada uno de los aspectos que se ponen en marcha, significará una mayor serenidad en el período de mayor exigencia: el rodaje.

Rodaje Durante esa etapa se concentran los mayores esfuerzos, compromisos y riesgos. Se trata de un período de gran exigencia donde cada elemento humano, y hay muchos implicados, desarrolla plenamente su trabajo. El equipo de producción deberá atender, simultáneamente, diferentes frentes de acción y tendrá que ofrecer soluciones a una importante cantidad de factores que, muchas veces, se presentan sin aviso previo. Traslados de personal, materiales y equipos, trámites burocráticos, organización de la comida del equipo, administración y control sobre los gastos, reclamos y compromisos a cumplir, cambios de planes, etc. cubren el tiempo útil de trabajo en producción. Normalmente se intenta que la primera semana de rodaje sea un periodo de relativa exigencia. Para ello se estructura el plan de filmación de tal manera de evitar las escenas más difíciles - en términos de cantidad de extras, decorados o acciones dramáticas - y facilitar el “acople” del equipo técnico en la práctica de cada día. Se hace necesario ir “de menor a mayor” y así permitir una mejor coordinación entre los distintos integrantes del grupo. Los primeros días de trabajo sirven para evaluar, tanto desde la dirección como la producción, y modificar los aspectos que no son satisfactorios logrando hacer más fluido el funcionamiento del conjunto. A medida que el rodaje avanza los mecanismos de comunicación y las tareas se regularizan permitiendo superar las dificultades de los primeros momentos del rodaje. Los gastos que se producen en las diferentes ramas deben ser autorizados por el jefe de producción siempre que se encuentren dentro de los valores previstos en el presupuesto. En caso de cantidades superiores deberán ser autorizadas por el productor ejecutivo. También ciertas decisiones que impliquen una variación importante en relación a lo previsto - por ejemplo la compra de mayor cantidad de material virgen - estará a cargo del nivel gerencial. Los ayudantes y el jefe de producción exigirán los comprobantes de gastos a cada una de las ramas para incorporarlos al sistema contable y controlar los gastos. Si bien dichas rendiciones deben ser diarias el control detallado de las mismas, y su verificación, se hace normalmente cada semana. Estos datos serán los que, una vez elevados a nivel gerencial, alimentarán las planillas de control y generarán las modificaciones en diferentes áreas, según lo decida el productor ejecutivo. En realidad el equipo de producción trabaja adelantado al proceso que se desarrolla. En otros términos, en el rodaje propiamente dicho, producción está de forma tal que casi no debe notarse su presencia. Es que el trabajo de producción debió haberse realizado con anterioridad para que, en filmación, todos los elementos necesarios estén disponibles y el rodaje se lleve a cabo sin dificultad. Sin embargo la presencia debe ser real y atenta. Cualquier inconveniente no previsto, de los que se presentan con frecuencia, deberá ser solucionado con la mayor rapidez y eficacia. En términos concretos el equipo de producción ya ha garantizado, junto al escenógrafo, la disponibilidad de las locaciones y decorados de los próximos días, ha facilitado el transporte de la utilería y del vestuario y los trabajos de preparación que se requieren. Se anticipó en el pedido del catering indicando cantidad, hora y lugar donde tendrá lugar la comida, contrató el transporte que trasladará a los actores principales, obtuvo el permiso de filmación correspondiente, garantizó la seguridad, etc. Todas estas tareas son previas al “desembarco” del equipo en el lugar del rodaje. Una vez que el director, los actores y los técnicos llegan a filmación el equipo de producción realizó todo lo necesario para que la labor se desarrolle con la menor cantidad de inconvenientes.

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En esta tarea es fundamental la permanente coordinación con el equipo de dirección que sigue con atención la marcha concreta del rodaje. La alteración de los planes, por cualquier motivo - actores que no completaron su labor, tiempos de rodajes diferentes, etc. debe ser inmediatamente comunicada al equipo de producción para ajustar lo realizado a la nueva exigencia. El equipo de producción tiene a su cargo el transporte del material virgen hasta el lugar del rodaje, la recepción del material expuesto en cada jornada y su traslado hasta el laboratorio de imagen, coordinando las entregas con los equipos de fotografía y cámara y montaje. También el control de las cantidades de los mismos y de los procesos que se desarrollan - revelación copias, etc. -. En el laboratorio acordará con el montajista los horarios de sala para la exhibición diaria si fuera posible, de la copia de trabajo para su evaluación por parte de los diferentes responsables técnicos y artísticos. Cualquier decisión de “retomas” u otra variante en el plan deberá ser recogido por producción para actuar en consecuencia. De lo anterior se deduce que uno de los temas en los que se debe poner mayor atención es en el sistema de comunicación que el equipo de producción debe establecer con el resto de las ramas. Se deben crear los mecanismos para que los mensajes entre las partes sean claros y rápidos. Muchos de los problemas que se suceden, y complican el normal funcionamiento de la producción, tienen que ver con malos entendidos o silencios que, cuando son aclarados, permiten solucionar con rapidez los inconvenientes que se presentan. Muchas veces el equipo de producción es visto como un “enemigo interno”8 dentro del conjunto. En cierto sentido se entiende que ello suceda ya que tiene la obligación de poner ciertos “límites” a los pedidos, incesantes y de diverso orden, que se repiten desde las diferentes ramas. De alguna manera el equipo de producción hace de “dique de contención” de los problemas e inconvenientes prácticos para que éstos no lleguen hasta la dirección y alteren el ritmo y clima de trabajo. Un buen equipo de producción es el que permite que todo lo que ha sido necesario, y aun más, fue posible y está a disposición y que aquello que no pudo satisfacerse no fue por desidia ni olvido sino porque, en verdad, está fuera de toda posibilidad de materializarse. Una buena relación entre los miembros de producción y el resto del equipo técnico hace mucho más fácil y placentera la tarea en el rodaje. Durante el rodaje el director de producción, cuya presencia en filmación generalmente no resulta necesaria, tiene a su cargo el control de los gastos que se suceden y el manejo financiero del proceso. Es el periodo de mayor exigencia económica - se pagan una importante cantidad de salarios, hay gastos para atender en todo el funcionamiento de la producción, se compran la mayor parte de los materiales, comienzan a cumplirse los plazos de pagos en los alquileres, garantías, seguros, etc. - y también el de mayor necesidad de dinero disponible. Para ello se deben asegurar los aportes financieros comprometidos con anterioridad, la disponibilidad y flujo de fondos y su distribución según criterios determinados. Para desarrollar su tarea el director de producción deberá contar con los elementos de control cuantitativo que le provee el jefe de producción - boletas, facturas, comprobantes - y verificar el cumplimiento de los planes previstos. En caso de notar alteraciones o desvíos deberá actuar inmediatamente para contener cualquier desborde que implique un riesgo a la continuidad y buen fin del proceso. En otros términos podrá determinar, en conjunto con la dirección, la limitación en la disponibilidad de horas extras, o de la cantidad de material virgen, la modificación de los planes, etc. Su misión durante el rodaje será asegurar la llegada a término del proceso iniciado aun cuando ello signifique sacrificar aspectos que hacen a un mayor resultado y sabiendo que, cuando la filmación haya concluido, todavía quedan muchas obligaciones a cumplir durante la postproducción.

Postproducción Una vez terminada la etapa de rodaje los responsables de la producción sienten haber atravesado el momento más difícil. Lo que sigue no tendrá tanto personal incluido: prácticamente se ha termina- do el contacto con los actores y la mayor parte del personal técnico. Disminuyen los niveles de tensión y requerimientos que, durante la filmación, no parecen dar tregua. En la postproducción se enfrentarán nuevos problemas a los que se deberán ofrecer buenas soluciones. Por un lado, al ser la última etapa del proceso, la “post” recibe la ”herencia” de los momentos anteriores que normalmente se traducen en la merma, o el agotamiento, de los recursos disponibles. Por el otro, los procesos que

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En cierta forma se considera a producción como separada del aspecto “artístico” de la obra como si el orden de ”realización” estuviera divorciada de los elementos materiales que la hacen posible. Página 6

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faltan completar son importantes: definen la calidad final del producto y no pueden ser descuidados. Así se suceden el montaje - en sus diferentes etapas -, el sonido, los trabajos de laboratorio, la mezcla final, los efectos ópticos, la edición final, la clasificación de luces, etc. Montaje Primer armado

Ajustes

Doble banda

Armado final de imagen

Armado de negativo

2° Doble banda

Sonido Sonorización

Grabación de música

Armado de pistas

Mezcla Neg. de sonido

Filmación de títulos

Clasificación de luces

Edición final

Laboratorio Efectos ópticos

Copia

Esta etapa, a veces, debe cumplir con ciertos tiempos máximos por compromisos de fechas asumidos con la distribución o por el simple motivo de no prolongar la producción ya que cada semana que pasa acumula costos de diferente origen. Adquieren importancia los gastos que se realizan en laboratorios, salas de montaje y sonido, grabaciones musicales, materiales para procesos ópticos, etc. así como la organización de las fechas y horarios en los que se harán los trabajos. Teniendo en cuenta que los recursos disponibles están llegando al límite de lo previsto es habitual encontrar problemas de orden financiero que, a esta altura del proceso, no son fáciles de resolver. Durante la postproducción son necesarios considerar ciertos asuntos - comidas, transportes, suministro de materiales, pagos al personal que trabaja - que, debido a su orden, no requieren la presencia del jefe de producción. Es por ello que éste permanece sólo una semana más después del rodaje en la cual cerrará las “rendiciones” de lo que aconteció durante el rodaje. Un ayudante de producción es el que se encarga de los aspectos prácticos mientras el productor ejecutivo sigue en su labor de controlar la marcha del trabajo y administrar los recursos disponibles para lograr un buen fin. Por último será posible una evaluación confrontando los datos planeados (presupuestos) con los que efectivamente tuvieron lugar y, también, extraer conclusiones. Los resultados finales deben ser comparados con aquéllos que dieron origen al proyecto. Entre los costos se incluyen los valores que son los estipulados por el juego de la oferta y demanda o los precios fijados con claridad en el mercado y, además, otros que están ligados a la forma de producción y el destino de la película. Fundamentalmente en el caso del director y el productor ejecutivo, pero también en otros factores humanos, se encuentran los principales responsables del cumplimiento o no de los planes previstos. Tanto en un caso favorable, como el de haber logrado terminar la película con menos recursos de los originalmente calculados, como en el caso opuesto, los montos contenidos en los rubros integrantes del presupuesto que refieren a los principales responsables del proceso pueden transformarse en valores de ajuste que conserven invariable el resultado final en relación al presupuesto original. La etapa de postproducción finaliza con la obtención de las copias compuestas (imagen y sonido). La salida de la primera copia se transforma en un momento especial a partir del cual la película adquirirá una singularidad indelegable y autónoma. A partir de allí deja de ser el imaginario compartido por un conjunto de personas, el sumidero de las ilusiones de muchos creadores, para transformarse en una mercancía, un objeto con valor de uso, que deberá enfrentar su inclusión en el universo de la difusión y comercialización.

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